Hoy 5 de marzo, la Hermandad de la Defensión rendirá homenaje al Santísimo Cristo de la Defensión en un acto que rememora su llegada al Monasterio de la Cartuja hace 230 años. Este acontecimiento histórico, que marcó un hito en la devoción jerezana, será recordado con una celebración especial en la Capilla de Caminantes, ubicada en el Monasterio de la Cartuja, a las 17:00 horas.
Según las crónicas de la época, recogidas por Fr. Nicolás de Córdoba, ex lector de Teología moral, Custodio Primero y Cronista de la Provincia, la imagen del Santísimo Cristo de la Defensión llegó al Monasterio de la Cartuja el 14 de febrero de 1795. La talla, procedente de Valencia, fue transportada río Guadalete arriba. Ese mismo día, la imagen fue bendecida por el Prior de la Cartuja, el Rvdo. Padre D. Nicolás de Hoyos, en un acto que selló su vinculación con la comunidad cartujana y con la ciudad de Jerez.
El 5 de marzo de 1795, apenas unas semanas después de su llegada, se celebró una solemne misa en la Iglesia del Monasterio de la Cartuja. En este acto, la imagen del Cristo de la Defensión fue colocada en el Altar Mayor, donde recibió los honores de una ceremonia grandiosa. El evento estuvo presidido por un emotivo sermón pronunciado por Fr. Buenaventura de Cádiz, un destacado sacerdote capuchino, quien subrayó la importancia espiritual de esta imagen para la comunidad. Los monjes cartujanos llevaron a cabo una ceremonia imponente, que dejó una huella indeleble en la historia religiosa de Jerez.
La conexión entre el Santísimo Cristo de la Defensión y el Monasterio de la Cartuja ha perdurado durante siglos. Como testimonio de esta relación histórica, la Hermandad de la Defensión organiza anualmente un acto de oración en la Capilla de Caminantes. Este año, con motivo del 230 aniversario del traslado de la imagen a Jerez, el acto cobra una relevancia especial. Será una oportunidad para reflexionar sobre el legado espiritual y cultural que esta venerada imagen ha dejado en la ciudad.
La Hermandad de la Defensión invita a todos los fieles y curiosos a participar en este acto de oración, que no solo celebra un hecho histórico, sino que también reafirma la devoción hacia el Santísimo Cristo de la Defensión.