La Hermandad de las Sagradas Cinco Llagas ha rescatado y sumado para su inventario y patrimonio, fruto de una muy generosa donación de la familia Cuesta Romero, el valiosísimo documento original de la bendición personal y que de puño y letra concediera en el año de gracia del Señor de 1929 el Papa Pío XI a Pedro Guerrero González, primer hermano mayor, tras su reorganización en 1939, de esta Hermandad y Cofradía y quien desempeñase ejemplar y eficazmente tan digno cargo durante los años que precedieron a la fecha de su primer canto de Santa Misa como sacerdote jesuita.
Este documento posee una profunda raigambre histórica y emocional para los cofrades de las Cinco Llagas -por cuanta admiración y seguimiento se profesa en el seno de la corporación a la vida y obra del Siervo de Dios padre Pedro Guerreo y asimismo por la larga y fructífera y leal vinculación y pertenencia de toda la familia Guerrero González a la nómina de hermanos excelsos de esta cofradía -no en balde Ramón y Manuel Guerrero González desempeñaron máximos cargos representativos de la Junta de Gobierno durante los años cuarenta y cincuenta así como la implicación del también familiar Carlos González Rivero-.
La bendición de Pío XI fue presentada, debidamente enmarcada, al cuerpo de hermanos durante la celebración del reciente Cabildo General Ordinario Informativo de Estación Penitencial celebrado en la sala capitular el pasado jueves día 23 de los corrientes.