Ayer tuvo lugar la presentación de la nueva saya de Madre de Dios de la Misericordia, obra del bordador jerezano Fernando Calderón.
Esta saya va sobre un soporte de tejido de primer nivel de tisú espolinado de telar manual con granito de plata, ajustándose la ornamentación a un estilo claramente barroco. Todos estos trabajos estarán basados, además del soporte de la noble tela tejida de forma totalmente artesanal, en un entramado de malla en oro. Sobre este soporte se podrá admirar en los entrecruces distintas piezas de cristal de Swarovski. En el centro de cada cuadrado que forma la malla se podrá ver una ornamentación que se remata con unas perlas naturales cultivadas.
También hay que destacar el trabajo ornamental que se estructura sobre el entramado de malla, cristal y perlas que irá abriéndose en distintas calles donde figurarán cartelas que hacen alusiones a motivos florales como el lis, orquídeas, nardos, claveles o azucenas. El remate de las distintas calles se culmina con unas macetillas donde se encuentran flores tembladeras de malta hechas a base de nácar, abalorios y perlas que van insertadas en unos muelles para darle movimiento y elegancia a todo el entorno de los bordados. Además, también llevará un festón en el centro de la obra con flores de lis así como guirnaldas que harán referencia a las cadenas de los cautivos que se representan en la iconografía de Nuestra Señora de la Merced e iconografía mercedaria.
Manto de salida
Además de la presentación de la denominada «Saya de las Perlas», fue presentado el proyecto del manto de salida de Madre de Dios de la Misericordia, obra también de Fernando Calderón. Un acto en el que se procedió a realizar la primera puntada de la primera pieza.
La cartela central del manto, es una pintura de estilo renacentista en la que se ve la Virgen de la Misericordia en trono de Gloria y bajo su manto acoge a los principales Santos de la Orden Mercedaria, haciendo alegoría de la sede canónica de la Hermandad. Los santos que aparecen son S. Pedro Nolasco, S. Ramon Nonato, S. Pedro Pascual, S. Pedro Armengol, Santa María de Cervelló, Beata María de Jesús, y S. Serapio.
Todos con sus correspondientes atributos iconográficos. Debajo la ciudad de Jerez sobre la cual la Virgen protege e intercede. Esta cartela será ejecutada en seda y esmaltes.
A ambos lados de la cartela aparecen dos aves fénix, que simbolizan el resurgir de la humanidad después de la pandemia.
Apreciamos también dos cartelas que albergan la letra de la primera saeta que se le canta a La Virgen cuando llega al estudio de Sebastián Santos a Jerez.
La base de tejido es un tisú espolonado de plata urdido manualmente.